Avanza testimonio de alias “Tololoche” en juicio de “El Chapo” Guzmán

El martes avanza el juicio a Joaquín “El Chapo” Guzmán, en el que Miguel Ángel Martínez Martínez, alias “Tololoche” continúa dando testimonio, durante su juicio en una corte federal en Brooklyn, Nueva York.

En la mañana, los fiscales le pidieron a un juez que sancionara al equipo de defensa por facilitar el contacto “no autorizado” entre el narcotraficante mexicano y su esposa, .

Durante el testimonio, Martínez ​afirmó que además de utilizar botes para transportar drogas, también usaban trenes. La idea de las rutas de ferrocarril habría sido de Raúl Guzmán, hermano de “El Chapo”.

También declaró que se crearon empresas de aceites para transportar droga en carrotanques; dijo que en ocasiones, la droga se mezclaba con melaza, la cual se colocaba a través de los empaques de este producto.

Entre sus declaraciones, se destaca que entre 1987 y 1993 traficaron aproximadamente más de 150 toneladas de droga, la mayoría cocaína. La marihuana dijo, se habría transportado solo entre 5 a 10 toneladas al año.

“Tololoche” aseguró, además, que en ocasiones usaban el sistema bancario, como por ejemplo para pagar a las esposas de “El Chapo”, que eran unas cuatro a cinco mujeres. Así mismo, señaló que a veces pagaban a los funcionarios de los bancos para evitar preguntas.

Los viajes con la droga se habrían llevado a cabo alrededor del mundo, excepto Australia y China, con una especial mirada a Tailandia, la cual comenzaron a ver como un posible proveedor de heroína blanca. Martínez dijo que adquirían el kilogramo por 10 mil dólares, la cual se revendía en 130 mil dólares, en Nueva York. Señaló que era el mejor negocio, a principios de los 90’s.

Martínez, testificó que cada diciembre recibía por parte de “El Chapo” hasta 1 millón de dólares, quien, afirmó, tenía diferentes propiedades, incluso un zoológico en Guadalajara con tigres, leones, panteras y venados. El dinero que ponía en la organización, lo utilizaba para la creación de túneles y viajes para adelantar negocios.

“Tololoche”, entre otros datos contó que “El Chapo” fue a Suiza para recibir un tratamiento con células rejuvenecedoras.

Las comunicaciones también fueron claves en las declaraciones de Martínez. El martes dijo que clonaban teléfonos y tenían maquinarias para grabar llamadas e interceptar teléfonos para grabar 5 líneas simultáneamente. “El Chapo”, dijo, cambiaba de celular cada tres o cuatro días.

Por su parte, la defensa tratará de desmentir el testimonio del expiloto del cartel de Sinaloa, de quien afirma es un adicto a la cocaína.

Martínez le confirmó a la Fiscalía que consumió coca, entre 1987 y 1995, cuando trabajaba con “El Chapo”, pero que así mismo tuvo temporadas de año o año y medio en las que se alejó de la droga. Diariamente, dijo, consumía entre 1 y 4 gramos de cocaína.

También afirmó que aunque probó la marihuana no fue de su agrado. Indicó que como consecuencia del uso excesivo de coca, se le perforó el tabique y que entre 1992 y 1993, le colocaron un cartílago en la nariz.

Aseguró que lleva 20 años ‘limpio’ y que la memoria no se le ha afectado para entregar detalles de lo que sucedió cuando trabajó con “El Chapo” Guzmán.

Martínez dijo al jurado que trabajó para Guzmán a fines de la década de 1980 y principios de la década de 1990, y que el cártel de Sinaloa pagó $10 millones en sobornos de drogas por lo menos dos veces a Guillermo González Calderoni, un alto funcionario policial en la Ciudad de México.

Calderoni, a cambio, informaba al cártel acerca de las investigaciones y ofrecía otras protecciones que ayudaron a evitar que Guzmán fuera atrapado, declaró Martínez.

Fiscales buscan sanciones

En la moción solicitada por los fiscales sobre contactos no autorizados entre el narcotraficante mexicano y su esposa, dijeron que el contacto fue “inadmisible” y que ocurrió “en concierto con la visita de un abogado al acusado después de dos días de juicio la semana pasada”.

Alegaron que personas que no fueron identificadas “parecen haber usado teléfonos celulares” con la intención de facilitar el contacto no autorizado.

El abogado acusado de supuestamente haber organizado el contacto no fue identificado públicamente.

Un abogado de Guzmán no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.

Guzmán, de 61 años, enfrenta 17 cargos criminales y una posible sentencia de cadena perpetua.

Las autoridades federales han impuesto estrictas medidas de seguridad a lo largo del juicio de Guzmán. Las presentaciones de la corte del martes se referían a una “determinación del Fiscal General de que las comunicaciones y los contactos entre el acusado y otras personas podrían causar la muerte o lesiones corporales graves a otros”.

A Guzmán se le ha negado el contacto con su esposa como medida de seguridad desde que fue llevado a la ciudad de Nueva York para enfrentar cargos de conspiración de drogas.

El juez Cogan, citando riesgos de seguridad, dictaminó que Guzmán ni siquiera podía abrazar a su esposa, antes de que se iniciara el juicio, incluso cuando elogió al infame narcotraficante por su buena conducta durante su régimen de aislamiento.

La solicitud de sanciones se produjo cuando el juicio entró en su tercera semana. El lunes, el jurado escuchó el testimonio de que Guzmán orquestó los envíos masivos de cocaína que lo hicieron tan rico que podía pagar sobornos multimillonarios a un poderoso comandante de policía.

 

 

Fuente: La voz de América